Navidad 2015

“Envejecer es como escalar una gran montaña: mientras se sube las fuerzas disminuyen, pero la mirada es más libre, la vista más amplia y serena.” Ingmar Bergman.

Los números de 2013

Los duendes de las estadísticas de WordPress.com prepararon un informe sobre el año 2013 de este blog.

Aquí hay un extracto:

Un teleférico de San Francisco puede contener 60 personas. Este blog fue visto por 1.600 veces en 2013. Si el blog fue un teleférico, se necesitarían alrededor de 27 viajes para llevar tantas personas.

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Los números de 2012

Los duendes de las estadísticas de WordPress.com prepararon un informe sobre el año 2012 de este blog.

Aquí hay un extracto:

600 personas llegaron a la cima del monte Everest in 2012. Este blog tiene 2.600 visitas en 2012. Si cada persona que ha llegado a la cima del monte Everest visitara este blog, se habría tardado 4 años en obtener esas visitas.

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Nuestros mayores

Por lo general, trabajar con seres humanos resulta muy gratificante pero especialmente, en esta ocasión hacerlo con personas mayores me ha enseñado mucho a nivel personal. Supongo que es debido a su generosidad, nobleza y a la gran sabiduría que les ha aportado la experiencia de una vida.

En la actualidad, nos dejamos invadir por los compromisos laborales, sociales,… y en ocasiones descuidamos aquellos que resultan ser los más elementales, los personales. Esto es lo que ocurre con muchos pacientes que se encuentran hospitalizados. Manifiestan que se encuentran solos y que ya no tienen deseo de continuar viviendo porque no son capaces de valerse por sí mismos ni tampoco cuentan con los recursos necesarios. Todos somos más frágiles y vulnerables cuando nos encontramos hospitalizados, por eso según me comentaron muchos de ellos, notar nuestra presencia en las habitaciones cobra un significado muy importante, ya que les confiere seguridad y confianza.

Del mismo modo, las enfermeras me han enseñado cómo tratar a estas personas, que como he referido antes, muchas se encuentran desamparadas. Me han transmitido que es imprescindible establecer una relación de cercanía, en la que el paciente sienta que se encuentra en una situación de igualdad con respecto a los profesionales de enfermería.

El resultado final de este rotatorio es que se acaba y me quedo con ganas de más.

 

Paula Villar

La importancia de la Enfermería Geriátrica

Durante un mes aproximadamente he tenido la gran suerte de rotar por la Unidad de Geriatría, un periodo de tiempo muy corto pero aprovechado.

Tanto el Hospital Universitario La Paz como el Hospital de Cantoblanco, en sus diferentes unidades cuentan con la participación de un equipo interdisciplinar constituido por enfermeras, médicos, fisioterapeutas, trabajadores sociales, terapeutas ocupacionales y psicólogos. Se trata de un equipo competente que desempeña funciones relevantes tales como identificar problemas en las personas mayores de cualquier tipo (físicos, funcionales, psíquicos o sociales) por medio de una valoración geriátrica integral (VGI) con el objetivo de proporcionar una considerable calidad asistencial.

Aunque comparten aspectos comunes, la dinámica de trabajo en estos dos hospitales es diferente, y esto me ha permitido abarcar una visión global de aquello que constituye la praxis enfermera. En ambos lugares la enfermera se encarga de llevar a cabo funciones múltiples y destacadas como son la asistencial y gestora-administrativa, razón por la cual la figura de la enfermera constituye un pilar básico dentro del equipo mencionado anteriormente.

 

Paula Villar

Apuesta por la Geriatría

Poco tengo que añadir, que no hayan comentado antes mis compañeras de prácticas clínicas sobre la realización como enfermeras a lo largo de éste corto pero intenso rotatorio.

Al margen de ésto, si me gustaría resaltar la importancia de hospitales como Cantoblanco, que cuentan con un pabellón entero, «San José», para pacientes geriátricos, algo con lo que no cuentan muchos hospitales de la Comunidad de Madrid. En este pabellón, a los pacientes se les trata como lo que son » pacientes geriátricos» , independientemente de la patología que les haya llevado allí. Los cuidados que reciben estos pacientes, aparte como es lógico de los cuidados generales que se darían a cualquier paciente, son cuidados adaptados a su condición de pacientes gariátricos. El equipo de profesionales con los que cuenta este pabellón, trabajan de manera interdisciplinar, con un único objetivo, el bienestar y confort del paciente a través de un abordaje integral.

Cansados estamos de ver las unidades de medicina interna de los hospitales llenas de personas mayores, ya que sus patologías pueden ser perfectamente tratadas en estas unidades, pero sólo eso, tratadas, al igual que tratan las mismas patologías en pacientes más jóvenes. Con ésto no quiero decir que éstas unidades no realicen correctamente su trabajo, ni muchísimo menos, tan solo que, al igual que existen hospitales infantiles y unidades pediátricas independientes, también el otro extremo de la población, los ancianos, necesitan contar con más hospitales geriátricos, donde los cuidados que reciban, estén orientados y adaptados a cada uno de ellos.

Por último, me gustaría dar las gracias a todo el equipo de profesionales del Pabellón S. José del Hospital de Cantoblanco, por la calurosa acogida que tuvimos desde el primer día, y por haber hecho de éste rotatorio, uno de los más bonitos y gratificantes de toda mi carrera.

Begoña Mendoza.

Igualdad de Recursos

El área 5 al que pertenece el Hospital Universitario La Paz, es un área afortunadamente rico en recursos geriátricos. Además del HULP, donde hay algunos enfermos geriátricos ingresados, sobre todo en las unidades de traumatología, está el Hospital de Cantoblanco, que cuenta con un pabellón de agudos, así como Hospital de Día.

Las URF ( unidades de recuperación funcional), colaboran en la rehabilitación de éstos pacientes que, una vez superado su proceso agudo, necesitan de la ayuda de profesionales, para conseguir una recuperación funcional que les permita llevar a cabo una vida similar a la que llevaban antes de su ingreso hospitalario. Estas unidades con las que cuenta el HULP, se encuentran en Cantoblanco  y en Cruz Roja.

Para llevar a cabo toda esta gestión de recursos, el HULP cuenta con una unidad de valoración geriátrica, en la que trabajan conjuntamente, traumatólogos, geriatras, fisioterapeutas, enfermeras, trabajadores sociales, que realizan un abordaje integral de todos estos pacientes durante su proceso de salud.

Pero, desgraciadamente, no todas las áreas de salud cuentan con los mismos recursos, por lo que nuestros mayores, no reciben la misma atención en una zona que en otra.

Dado que nuestra población es una población cada vez más  envejecida, y que según datos demográficos, en el año 2020 se preveé que el 20% de la población corresponda a mayores de 60 años, de los cuales muchos serán octogenarios, considero que sería bueno que la gestión de recursos geriátricos, se realizase de una manera más equitativa, para que, desde las distintas áreas de salud, nuestros mayores tengan la misma cobertura que la que gozan ahora los pacientes del área 5.

Begoña Mendoza.

Prácticas Únicas.

Pocos rotatorios me ha dado tanta pena acabar como este.

Ha sido corto, pero intenso. Creo que es una gran idea ir rotando por distintos servicios de una misma unidad; desde la unidad de valoración geriátrica, unidad de agudos, recuperación funcional, hasta llegar a hospital de día. Es la mejor forma de ver la evolución de un paciente geriátrico desde distintos puntos de vista. Considero que ha sido un rotatorio muy completo, donde he aprendido muchas cosas.

Lo que más me ha llamado la atención, además de la complicidad del equipo interdisciplinar, ha sido la aplicación de todo tipo de cuidados a los pacientes por parte de las enfermeras. Es decir, que la práctica no se centra en técnicas, procedimientos y administración de la medicación, sino que comienza desde los cuidados más básicos cubriendo todas las necesidades de forma individual. En teoría, esto no debiera sorprender a nadie, pero cualquiera que haya rotado por otras unidades de hospitalización, o por lo menos en mi experiencia así ha sido, muchas veces no se establecen las tareas del turno de esta manera.

El cariño que se transmite a los pacientes y a sus familias, no lo había visto yo antes en ningún otro rotatorio. La manera de implicar y educar a la familia es imprescindible para la recuperación de estos pacientes. Un problema que he detectado, ha sido que en pacientes geriátricos llamados ya de «la cuarta edad«, tienen familiares (hijos en su mayoría), de edad también avanzada, muchos de ellos con posibilidad de encontrarse ingresados en el  mismo pabellón en caso de incidente. Es decir, los cuidadores podrían tener el perfil del paciente geriátrico. Esto supone un riesgo para la salud de ambos, ya que uno puede no ser bien cuidado del todo, y el otro puede estar en riesgo por tratar de ayudar a su familiar (caídas por ejemplo). Por todo ello, es imprescindible la labor de cuidar al cuidador, de educarlo a la vez que educas al propio paciente. Creo que esta labor se lleva a cabo en esta unidad, tanto las enfermeras, como terapeutas ocupacionales y fisioterapeutas.

En definitiva, creo que he aprendido mucho durante estas prácticas, tanto a nivel profesional, como personal. La acogida en el equipo me ha facilitado la adaptación, consiguiendo desarrollar un rotatorio muy satisfactorio. Y ya por último dar las gracias a mi compi, que ha sido de las mejores que he tenido en toda la carrera. Gracias Belén.!!!!

Carlota.

Miedo a la independencia

Episodios como la fractura de cadera y el ACVA suponen para la persona mayor un proceso de recuperación largo y de gran esfuerzo. Durante este tiempo, la persona pasa por diferentes unidades de hospitalización y por unidades de recuperación funcional, pudiendo pasar muchas semanas, incluso meses, entre su ingreso en una fase aguda hasta el inicio de su rehabilitación.

En todo este tiempo, y a pesar del esfuerzo de todos los profesionales por recuperar la máxima independencia funcional del paciente, es inevitable que la persona cree algún tipo de dependencia (quizás psicológica) del equipo sanitario. Tras sufrir una caída o un ACVA, algunos pacientes pierden confianza en sus capacidades y, a pesar de reconocer su mejoría, no saben cómo afrontar su vida tras este episodio. Los profesionales sanitarios, durante su ingreso, suponen para el paciente una fuente de seguridad a la que se agarran, y que en muchos casos les resulta difícil soltar.

En ocasiones, esta dependencia es mucho mayor en la familia que en el propio paciente. Cuando perciben que se acerca el momento del alta se plantean la duda de si serán capaces o no de cuidar o ayudar a su familiar. Esta inseguridad se traduce, en algunos casos, en la insistencia de alargar la estancia del paciente en la unidad.

Ante esto, el Hospital de Cantoblanco (pabellón San José), cuenta con el Hospital de día. Este nivel geriátrico permite, entre otras muchas cosas, que tanto pacientes como familiares vayan perdiendo esa dependencia de los profesionales sanitarios y de la hospitalización. En los casos en los que el miedo al alta es mayor se ofrece la posibilidad de acudir incluso 4 veces por semana al Hospital de día (lo normal son 2 días, como mucho 3) y a lo largo de las semanas el número de días que acuden se va reduciendo.

Por todo esto, los profesionales del Hospital de día, constituyen una herramienta fundamental a la hora de educar y «adiestrar» a paciente y familia, de forma que sientan que son lo suficientemente capaces de afrontar esta nueva etapa, es decir, que se sientan seguros. Nos obstante, una vez dados de alta, tienen la posibilidad de llamar al hospital para preguntar cualquier duda a cualquiera de los profesionales del equipo, constituyendo un lugar  de referencia y confianza para los pacientes y sus familias

Por último quiero destacar lo muchísimo que me ha sorprendido todo el trabajo que se realiza en el Hospital de día. En las 6 o 7 horas que pasan allí los pacientes, aprenden en las charlas educativas, se estimulan cognitivamente a través de debates, trabajan para manejarse mejor en casa, se rehabilitan, se relacionan … Me parece un instrumento perfecto para incentivar el Envejecimiento Activo.

Belén Mobley

Hospital La Paz y Cantoblanco: experiencia de prácticas

A través de este rotatorio, tanto en el Hospital de La Paz como en el de Cantoblanco he tenido la oportunidad de apreciar de cerca el trabajo tan valioso y necesario que desempeñan las enfermeras y el resto de profesionales que integran el equipo multidisciplinar especializado en el cuidado de los pacientes geriátricos.

Durante la primera semana en el Hospital de La Paz, la integración al equipo se hizo inmediata gracias a la comunicación y profesionalismo del Equipo de Valoración Geriátrica, aspecto que me facilitó el aprendizaje y me permitió actuar de manera más autónoma. Dentro de las cualidades enfermeras en este equipo, cabe destacar la calidez y la empatía, aspectos que adquieren importancia al tratarse de pacientes tan receptivos y con deseos de expresarse e interactuar con las personas de su entorno.

En esta semana, que se hace corta pero muy enriquecedora, pude descubrir el primer paso para ayudar al paciente geriátrico de manera efectiva. Independientemente de su patología  por la cual se encuentra ingresado (sin restarle a ésta relevancia), debemos realizar una entrevista que se complementa con la formulación de varios test y/o escalas anteriormente estudiados en clase. A continuación, se registran todos los detalles que nos ofrecen los pacientes y sus familiares identificando posibles obstáculos para su recuperación.  Por lo tanto se estudian datos que abarquen todas las esferas de la persona (físico, mental, social, familiar,…), ayudándonos a crear una visión global del paciente. Personalmente este ejercicio me permitió comprender, que algunos detalles superfluos para cualquiera de nosotros (subir un par de escalones, vestirnos, hacer la compra,…), puedan llegar a ser verdaderos problemas para estos pacientes, disminuyendo así su calidad de vida.  

Gracias a la información obtenida de los pacientes a diario, se realiza una sesión clínica a primera hora de la mañana, en la que médicos y enfermeras exponen los problemas hallados,  la evolución de los pacientes y los posibles recursos que se les puedan ofertar, de esta manera todo el equipo intercambia información y aporta ideas. Durante los tres cursos, se ha hecho hincapié en la importancia del trabajo multidisciplinar, pero he podido comprobar en primera persona en este rotatorio de prácticas, como es fundamental  y básico en el cuidado, una relación de comunicación y  complementación, que abarque las diferentes áreas de la persona para la culminación de objetivo común: mas años de vida autonomía en el anciano

En Cantoblanco, di por hecho que estaría al principio un poco perdida, sin embargo, rápidamente comprendes la unidad ya que se realiza continuidad de cuidados a los pacientes que tras su recuperación en el Hospital La Paz necesitan rehabilitación, para conservar su independencia y autonomía. Así la Unidad de Geriatría, ubicada en el pabellón de San José del Hospital de Cantoblanco se divide en tres zonas, la Unidad de Rehabilitación Funcional (URF), la Unidad de Agudos, en la que podemos encontrar pacientes ingresados por diversas patologías y finalmente el Hospital de Día.

Tanto en la URF como en el Hospital de Día pude tener contacto por primera vez con las actividades llevadas a cabo por los fisioterapeutas, trabajadores sociales, psicólogos y terapeutas ocupacionales. Esta experiencia que me aporto mucho, ya que al poder apreciar de cerca el trabajo conjunto de todos estos profesionales y los avances cotidianos que se consiguen en el paciente,  pude comprender e integrar a nivel profesional, que alrededor  del paciente geriátrico  hay mucho por hacer y una gran parte ya se hace, obteniendo resultados muy favorables en la persona y su familia.

En resumen, durante este rotatorio recibí más de lo que esperaba, me aportó mucho como persona y como profesional en un futuro, para comprender la gran labor de la Enfermería Geriátrica y del equipo implicado en esta especialidad, tuve la oportunidad de encontrar grandes personas, a comprender que los pequeños detalles pueden conducir a grandes cambios y a conocer el verdadero significado de la palabra “trabajo multidisciplinar”.

Karem Márquez